Aquí estoy, otra vez y vuelvo para darte lo que me hace estar bien: todas esas palabras que tú sientes y sé que muchas forman parte de tu vida también. Por eso te las canto. Y pensar que lo que escribo puede ser tan importante que toque algún corazón. He pensado darte todo lo que tengo Y prefiero hacerlo en forma de canción. Canciones.
Canciones – El canto del loco
Arrancamos retos
- Dos retos: un para resolver la cuestión de “no sé qué hacer con mi vida”. Y otro que es para trabajar el sentirse desconectado de la vida y sentirse en soledad.
- /retos
With or without you – U2
Esta es, seguramente, la canción más famosa de grupo de rock irlandés U2. Cuando uno empieza a entender la letra es fácil interpretarla llevándola al terreno del amor: el típico romance sentimental al que uno se ha entregado por completo aun sabiendo que era una relación insostenible o dañina. Pero, en verdad, esta canción fue escrita por Bono en el sur de Francia durante la gira de The Unforgettable Fire, sincerándose respecto de la dualidad entre ser una estrella de rock y un esposo que debía mantener su matrimonio.
El momento “ohh! Ohh! Oh! Ohhhhhh!” que pone la piel de gallina y hasta hace saltar alguna lagrimilla expresa perfectamente el sufrimiento de ese corazón dividido.
Cantar esta canción frente al espejo nos confronta. Empiezas cantando siendo tú, y al verte en el espejo hay un momento que te fusionas con tu reflejo. Tú simbolizas el Bono que quiere ser una estrella del rock, que se está entregando en alcanzar ese ideal. Tu reflejo simboliza el esposo, el que solo quiere vivir con sencillez. Tu personalidad versus tu autenticidad. Y en medio de la canción ya no sabes quién está interpretando qué.
Y al final te das cuenta: tu autenticidad, tu verdadero yo, está pidiendo paso. Está cansado/a de verse impostado por querer demostrar a todo el mundo que es una estrella del rock. Simplemente quiere salir a jugar para expresarse a pleno pulmón y vivir la vida con el corazón abierto a la incertidumbre y espontaneidad.
El fallo positivo – Mecano
La canción del grupo español Mecano trata sobre el virus del VIH que a principios de la década de los años noventa, se convirtió en la primera causa de muerte en la población de 25 a 44 años en España. Hablamos de que a mediados de los 90 el sida era responsable de casi seis mil defunciones al año.
La ignorancia vestida de puritana y de santa moral, como dice la canción, se sumaba a los problemas físicos de los que sufrían (y sufren aún) los enfermos. Y desde ese lugar aparecía el dilema que se expone en el hit: “pesando en la balanza del amor la ciencia y la conciencia”. La ciencia que derivó en una serie de normas, precauciones y leyes. La consciencia de atender y honrar lo que uno siente que ha de hacer más allá de las normas y de su propia integridad física.
Sería fácil hacer un guiño a lo que estamos viviendo ahora como sociedad cambiando el VIH por el Covid_19. Las normas alrededor de las vacunas (que cada vez dividen más a la población considerando que unas personas pueden disfrutar de un tipo de actividades y otras no), el miedo que aparece en las personas a contagiarse, de abrazar, de expresar su amor…
Pero tampoco quiero quedarme aquí. No me interesa esto. Que cada uno haga su lectura del coronavirus. Lo que sí me gustaría es ir a otra raíz. No deja de ser esta una canción espejo. Lo que te invito es que te mires al espejo y te pongas esta canción teniendo en mente uno de tus miedos más profundos.
El suicidio se ha convertido en el top 3 de las causas de muerte (al menos en España) y se ha visto incrementado durante estos años de pandemia (algo que expliqué en el capítulo Y tú ¿por qué no te suicidas?). Mueren más personas por suicidio que por accidente de tráfico. Y eso que muchos accidentes de tráfico estoy bastante seguro que son suicidios o intentos de. En este ejercicio espejo, tu miedo es la ignorancia vestida de puritana y de santa moral. De hecho, nuestros miedos vienen de la moralina de la sociedad. Se trata que te liberes de ella y hagas caso a tu conciencia.
¿Cómo hacerlo? En el final del videoclip de “El fallo positivo” de Mecano nos dan la clave. Ahí aparece el siguiente mensaje: “El cariño y la comprensión para con los seropositivos y los enfermos de sida refuerza sus defensas, y les hace fuertes, ayudándoles a combatir su enfermedad o evitando que esta llegue a desarrollarse”. Transformándolo a lo que nos atañe:
El amor y la comprensión para con los enfermos de vida refuerza sus defensas, y les hace fuertes, ayudándoles a combatir su enfermedad o evitando que esta llegue a desarrollarse.
Javi versión poeta xD
Date amor. Compréndete. Date vida.
Mambeando – Onda Vaga
Y esto nos lleva a la siguiente canción espejo: mambeando. Aunque creo que en esta ocasión quizás empieces frente al espejo pero luego te sueltes y acabes bailando y cantando por toda la casa. Y eso está bien. Porque como dice la canción:
Qué lindo que es estar en la Tierra después de haber vivido el infierno. Qué lindo que es poder amarte y mirarte otra vez después de estar tan enfermo. Cántale a la luna y al sol. Cántale a la estrella que te acompañó. Cántale a tus amigos con el corazón. Cántale a la luna y al sol. Canta que es la Tierra que canta en vos. Cántale a tus amigos con el corazón.
Y un pequeño apunte y reflexión sobre el “canta que es la Tierra que canta en vos”. Porque como explico tanto en el capítulo de tu ikigai no va de ti como en el de la felicidad del segundo violín de orquestra: has venido a ser una expresión de la vida, pero para eso necesitas entender que tú no pintas nada. Que necesitas desvanecer ideas tales como que eres alguien, que tienes que llegar a un lugar, que necesitas demostrar(te) algo constantemente, etc.
No, no y más no.
Deshazte de todo esto y canta. Canta que es la Tierra que canta en vos. No tú que le canta a la tierra.
Sabor mestizo
Y acabamos hoy, para no alargar el capítulo, con otra canción que me enamora: sabor mestizo de Marcel i Júlia. No me puedo creer que no haya hablado aún de ella. De nuevo, hay muchas maneras de interpretar esta canción. Para mí coge potencia y envergadura cuando se la cantamos a nuestros anhelos, a nuestro yo más auténtico.
Tengo el corazón viajero
No de viajar por todo el mundo, no. Sino el corazón con anhelo de aventuras, de amar, de romperse, de vivir. Tú serás la guía que lleva al montañero le decimos al corazón soltando toda pretensión de querer controlar y orquestar una existencia insípida y predecible.
Empieza el juego
Y es altamente adictivo: este mundo me lo comeré contigo. Porque la única manera de vivirse plenamente es transformando nuestro día a día en un juego. Piénsalo: no nos jugamos nada. Deja de hacer ver que sí, que lo que haces es extremadamente importante. No lo es. Lo único que debe ocuparte es que juegues a expresar todo tu potencial a cada momento y en cada suceso que te acontezca en tu existencia.
La vida es color fuego
Ni es gris. Ni es pesada. Ni es aburrida. Ni es jodida. La vida es color fuego. Es el banquete de Asterix y Obelix cuando terminan su aventura. Llena de olores, sabores, risas, colores, calores… Y si no estás viviéndola así, te invito a que des un golpe en la mesa y empieces a transformarla.
Porque nunca es tarde, siempre es pronto
Nunca es tarde para ponerse a volar. Siempre es pronto para ser cobarde. Y para poder volar hay que ser valiente. Valiente para volver a vivir como niños: sin control, sin miedo a la incertidumbre, con espontaneidad, queriendo ser miles de personajes (cowboys, bomberos, policías, ladrones, estrellas de rock, perros, leones, astronautas, alienígenas, muñecas, travestis, canicas…). Y esto se entrena con improsofía: la unión de la improvisación teatral y la filosofía.
Tú eres mucho más cañera
Empieza el juego. Empieza a deshacer esta creencia de que eres alguien concreta. Busca tu manera de abrir el corazón. De jugar como un niño. De expandirte y dejar que florezca todo lo que llevas dentro. Y entonces brillará todo a tu alrededor.
Como la luna. La luna siempre me pareció un astro fascinante y de pequeño me dejaba siempre boquiabierto. Ahora, con unos añitos más en cada pierna, sigue sin dejarme indiferente. Sigue embobándome. Cuando de pequeño me dijeron que no tenía luz propia no me lo podía creer. ¿Cómo no va a tener luz propia con lo que brilla siempre?
Pero es que precisamente ahí está su magia. Es un astro que no pretende nada, simplemente es ella misma. Y cuanto más ella misma es, más permite que brille su amigo sol. Permítete ser como la luna: un ser completo. Entonces todo empezará a brillar a tu alrededor.
Tú eres mucho más cañera.
Vamos a jugar con el niño que se esconde dentro.
Jugar. Jugar. Y jugar. Así emergerá tu autenticidad. ¿Y después? Después a volar.
¿Te ha gustado este capítulo?
Para mí es muy interesante saber cómo te están ayudando todas estas reflexiones, entrevistas y propuestas de ejercicicos. Puedes darme tu opinión aquí o dejar tu valoración:
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