¿Cómo hacer que me sucedan cosas buenas en tiempos difíciles? Menuda pregunta, ¿no crees? ¿Cosas buenas? ¿Tiempos difíciles? ¿Que me sucedan? Hoy vamos a abordar todo esto a través de una charla inspiradora que Anne Igartiburu mantuvo con Marian Rojas. ¿Te adentras conmigo a esta aventura?
Dark and difficult times lie ahead Harry
Albus Dumbledore
El origen del capítulo de hoy: cómo hacer que me sucedan cosas buenas
Hoy me gustaría traerte una serie de recomendaciones que seguro te serán muy útiles para estos tiempos aparentemente sombríos. El bombardeo de negatividad es impresionante: hasta ahora todo lo relacionado con el covid. De repente el covid desaparece y emerge la guerra de Rusia contra Ukrania. Y constantemente estamos expuestos a este runrun negativo y esto tiene unas consecuencias terribles para nuestras vidas. Y quizás no somos conscientes.
El groso de lo que te traigo hoy aquí es gracias a una de las múltiples entrevistas que Anne Igartiburu hizo en su canal de instagram. Concretamente la que mantuvo con Marian Rojas, autora de varios libros: seguramente el más famoso “Persona Vitamina”. Te dejo en las notas del programa el enlace a la entrevista en cuestión.
Deja la obsesión por el control
La charla entre estas dos mujeres empieza fuerte, pues se dió en septiembre de 2020: ya habiendo abandonado la cuarentena que nos mantuvo encerrados tantos meses en casa, pero empezando a ver los efectos colaterales de todo ello. Y Marian empieza poniendo encima de la mesa el tema del control, algo a lo que uno debería ser ciego para no haberse enterado del gran aprendizaje del covid: la sensación de control es una ilusión. La vida no se puede controlar.
¿Por qué hablamos de esto ahora? Porque, una vez más, esta sociedad que hemos construido tiene una gran incongruencia. En esta ocasión la incoherencia se da entre nuestro anhelo de vivir en paz y el pensar que esta paz la obtenemos gracias a tener el control de lo que acontece a nuestro alrededor. Si vivimos desde este lugar no tardaremos en darnos cuenta que a mayor control, más tensión nos generamos en nuestro vivir.
¿Por qué? Bueno, siempre pongo el mismo ejemplo porque es algo que nos sucede a todos… Imagínate que estamos en un estado civil de soltería. Y que estás bien pero a la vez pues ya tienes ganas de estar con alguien. En pareja, vamos. Y para ello te pones a pensar y te dices, ostras pues me gustaría encontrar a un chico o una chica que fuera así y asá… Y fíjate que cuantas más condiciones pongas, más dificultades aparecerán para que encuentres a alguien que encaje y, a la vez, cuando la hayas encontrado cualquier movimiento que haga esa otra persona que la aleje de tu listado: tensión al canto. Pues esto es lo que sucede cuando queremos controlar las cosas.
Cortisol sí, pero en su justa medida
Dice Marian que el controlador es un generador de cortisol a todas horas. Yo, como siempre anuncio, no soy ningún experto en temas médicos pero investigo lo mío para estos capítulos (al menos para aportar un primer aproach). El cortisol es una hormona que se la conoce como la hormona del estrés. Se produce en las glándulas suprarrenales que para que las puedas situar físicamente esto es en la parte superior de cada riñón. Y actúa como un neurotransmisor en nuestro cerebro, especialmente cuando enfrentamos situaciones difíciles o de alto grado de tensión.
Para seguir avanzando un poquito y entender la magnitud de lo que estamos hablando necesitamos responder a la pregunta: ¿En qué funciones del organismo interviene el cortisol? Y parece que interviene en muchas:
- En el metabolismo de los carbohidratos, las grasas y las proteínas. O sea, que dependiendo de los niveles de cortisol es como tu cuerpo maneja el uso de todo lo que comes.
- Regula los niveles de inflamación en tu cuerpo.
- Controla tu presión sanguínea.
- Equilibra los niveles de azúcar en la sangre (glucosa).
- Controla tu ciclo de sueño y vigilia.
- Eleva la energía para que puedas manejar el estrés.
- Ayuda a equilibrar la sal y el agua del cuerpo.
- Contribuye con la memoria y la concentración.
Entonces, fíjate, si nosotros nos disponemos ante la vida como controladores, estaremos generando grandes tensiones a nuestro alrededor y esto hace que se dispare el nivel de cortisol. Y este pico hace que todas las funciones anteriores puedan verse alteradas. Y eso nos aleja del propósito que anunciamos en el título del podcast de hoy: cómo hacer que nos sucedan cosas buenas.
Pautas para hacer que me sucedan cosas buenas en tiempos difíciles
Comprensión de cómo funcionamos ante el miedo
Lo primero que nos expone Marian para empezar a hacer que me sucedan cosas buenas en tiempos difíciles es que comprendamos cómo funcionamos frente al miedo. Yo lo voy a resumir muy mucho, te recomiendo la charla si quieres profundizar más. Al lío.
Cuando nos vemos envueltos en una situación que nos genera miedo, aparecen la adrenalina y el cortisol. Esto es adecuado que sea así porque gracias a ello podemos hacer frente a esta situación. Imagínate que vamos por la calle y nos atracan a punta de pistola. Se activa la adrenalina y el cortisol y reaccionamos. Ya sabes: huimos o le hacemos frente.
Lo rico de entender esto viene ahora. Por un lado Marian nos recuerda que el cuerpo y la mente no distinguen entre realidad e imaginario: esto quiere decir que si volvemos a revivir la situación ya sea porque volvemos al lugar de los hechos y nos viene a la memoria, o simplemente estando en casa lo rememoramos; pues resulta que se activa de nuevo el mismo mecanismo.
Por otro lado, como decía Wiston Churchill: “me he pasado la mitad de mi vida preocupándome por cosas que nunca me ocurrieron”. Y es que el 90% de las cosas que pensamos no suceden. Y juntándolo con otra estadística que menciona que el 80% de nuestros pensamientos son negativos. Pues ya tenemos el escenario de la película. Resumiendo: el 90% de nuestras preocupaciones no sucederán jamás.
El problema de esta manera de funcionar es que juntando toda la información, podemos ver que nos auto generamos unos niveles de cortisol exagerados. Podríamos decir que nos auto intoxicamos de cortisol porque vivimos en un estado de estrés y alerta constantes. Esto provoca diferentes cambios tanto a nivel físico como psíquico que derivan en una inflamación constante. Dice Marian que vivimos en la sociedad de la inflamación.
Todo este funcionamiento deriva en un bloqueo de la corteza pre frontal que, básicamente, es la encargada de la creatividad, de la solución de problemas, etc… Y hacen que nuestro sistema inmune se debilite a niveles alarmantes.
¿Qué son cosas buenas?
Una vez entendido nuestra respuesta natural y biológica frente al miedo, y antes de ir a pautas más concretas, es interesante analizar el otro punto. Claro, si lo que queremos es entender cómo hacer que nos pasen cosas buenas necesitamos poner encima de la mesa qué significa este “cosas buenas”. O dicho de un modo un poco más tradicional: qué es la felicidad. Aquí no me voy a meter en este berenjenal porque se alargaría todo infinito. Lo que voy a recurrir es a lo que dice Marian en la entrevista (y que recuerda mucho a lo que exponía Viktor Frankl):
La felicidad no es lo QUE me pasa, sino CÓMO INTERPRETO lo que me pasa.
Marian Rojas – reintrepretando a Viktor Frankl
De lo que surge una nueva pregunta: ¿de qué depende nuestra interpretación? Y aquí ya podemos ir a algo más genérico y tangible para todos.
- Estado de ánimo
- Serotonina (hormona del prozac)
- Actitud
- Energías → Barcelona, ven a impro
- Sistema de creencias
- Ser consciente del discurso interior
- Dominar la voz interior vs distanciarse de ella
- Sistema reticular activador ascendente (enlace)
- Funciones: consciencia, regulación de la transición sueño-vigilia, atención
- Marian: liga esto último con la 5ª ley de la abundancia la intención y el deseo poniendo de manifiesto que lo que sucede muchas veces es que no sabemos qué queremos ver materializado
- Nota: pensar en lo malo para que no me arrollen las expectativas o para alegrarnos cuando no suceda… Ojo, porque desde ahí la disposición es de carencia y no sucede la magia, no la detectarás
Ejercicios sencillos y prácticos para hacer que me sucedan cosas buenas
- Deporte: reduce el cortisol
- Yo añadiría movilizar todas las energías → estado de ánimo
- Escribir en papel y boli: pasa por congeladores, hay un alivio al final
- Tratarnos bien: ejercicio interpretación de los mundos múltiples
- Personas vitamina:
- aquellas que suben la oxitocina y bajan el cortisol
- 8 abrazos al día
- Si no tienes a nadie, masaje
- Meditación y aceptación
- Alimentación: alejarnos de la CRI (comida rápida inflamatoria)
- Gestionar la pantalla
- Vamos a ella normalmente cuando hay aburrimiento o estrés
- La mente necesita un descanso pero ahí en verdad no descansa
- Nos quita de la experiencia más natural y viva
- Nos hace perder atención
Resumen
Para lograr que me sucedan cosas buenas en tiempos difíciles necesito entender que yo puedo tener la clave para lograrlo. Lo primero es entender cómo funcionamos frente al miedo. Hemos visto que ahí aumenta nuestro cortisol y esto prolongado en el tiempo nos intoxica y, entre otras cosas, provoca estados de ánimo más bajos y nos debilita el sistema inmune.
A mí me parece clave comprender que este miedo, hoy día, nos lo generamos nosotros a través de nuestro sistema de creencias. Un conjunto de ideas que ha conformado nuestra personalidad e identidad. Todo lo que acredite o acompañe lo que creo ser, bien. Todo lo que lo amenace: mal, alerta, miedo, cortisol, pupa.
Y la última clave: entender que no es lo que me pasa sino cómo interpreto lo que me pasa. Y ahí es clave el estado de ánimo, de nuevo las creencias y dónde pongo mi atención. Hay que cuidar esto con todo lo que os he expuesto: subir energías, cuidar la mente y la atención.
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